Tratar de imponer el pensamiento único a una sociedad es una perversión. La izquierda gusta del pensamiento único. Por eso nunca podré simpatizar con la izquierda.
- Toda persona, por el mero hecho de ser persona, posee una dignidad inalienable.
- La libertad forma parte de esa dignidad. Una persona vive su dignidad y en dignidad cuando tiene la posiblidad de ser libre en su pensamiento.
- De la misma manera que no existen dos personas iguales, también puede y deben existir personas con distintas formas de pensar.
- Toda persona, grupo, sociedad, institución… que impida la libertad de pensamiento, es intrínsecamente perversa.
- Dios, que nos creó como creaturas libres nos permitió tal libertad que hasta nos dejó libres para poder rechazarlo. El Dios cristiano no crea seres sumisos.
- El pensamiento único es una perversión. Solo las personas habitadas por el mal tratan de imponer el pensamiento único. Una persona perversa es la persona que obra con mucha maldad y lo hace conscientemente o disfrutando de ello.